martes, 28 de abril de 2015

¡PELIGRO, ARTE!

¿Ves inofensiva la fachada de esta iglesia? Pues cuidado, porque no es tan "inocente" como parece.
Se trata de la Iglesia de la Santa Cruz de Florencia y en ella se produjo un síndrome psicológico muy singular.
Stendhal era un joven escritor que visitó esta ciudad italiana en el 1817 para escribir uno de sus diarios.
Se empapó de gran cantidad de pinturas, esculturas, edificios arquitectónicos... Pero, el momento decisivo fue al entrar en esta iglesia. La belleza era tal, que el escritor empezó a sentir vértigos y una extraña angustia y tuvo que salir. Más tarde, fue a visitar a un médico que, después de medirle el pulso y revisarle los glóbulos blancos, le dijo que padecía una "sobredosis de belleza". A esto se le acabó llamando: "síndrome de Stendhal", "Síndrome de Florencia" o "Estrés del viajero".

En principio, todos podemos padecer ciertos síntomas: como emoción, admiración... pero hay casos extremos (que pueden llegar a provocar incluso alucinaciones) que suele darse en personas muy sensibles, o turistas que sólo van a visitar obras de arte en concreto y que, tal es su admiración por ellas, que les lleva a "sufrir" este síndrome.

No obstante, también es cierto que el conocimiento popular de este síndrome, según algunos psicólogos, predispone a los turistas a sufrirlo. Incluso, en algunos casos, las propias ciudades lo utilizan con el fin de atraer a más público.

Sea lo que sea, cada vez se diagnostican más casos (incluso en el Hospital de Santa Maria Nuova hay un departamento exclusivo para estos casos). Así que recuerda, la próxima vez que vayas a algún lugar que tenga rincones históricos o artísticos de gran belleza, mantente alerta si no quieres padecer este síndrome!

Aquí dejo un spot de audi de 2005 en el que hablan de este mismo caso:

Bea Not

miércoles, 15 de abril de 2015

Conseguir lo que quieres… ¿solo con imaginarlo?


“La "Ley de atracción" y sus derivados, hablan de imaginar algo que deseas con fuerza, actuar como si lo hubieses conseguido y en breve "el Universo" hará todo para que lo obtengas.”



Bueno, esto no es exactamente así, el universo no se va a alinear para que  tú en especial consigas algo que en ese momento se te pase por la cabeza 


 Pero ello no quiere decir que no existan otros métodos, el universo puede que no haga nada pero tú sí que puedes.

El primer paso para conseguir algo no es pensar que se puede hacer, si no saber que se puede hacer, que se va a conseguir hacer y qué es lo que tú quieres que suceda.

Es algo así como una sugestión, pero yendo un paso más allá. Ya que no modificas tu estado físico si no el psicológico. De la misma forma que si te sientes segura la gente te muchísimo más atractiva, si estás visualizando un éxito en tu vida y te sientes seguro de conseguirlo la gente se predispone a facilitártelo aún sin saberlo conscientemente.

 Habrá cosas que sean más complicadas que otras o que dependan más del azar pero está claro que es más fácil correr una carrera en la que sabes que llegarás a la meta, a una en la que creas que puedes que puedes caerte en algún obstáculo. 

¿Cómo conseguirlo?
Ser positivo
No es una ciencia exacta ni mucho menos pero ser positivo favorece que ocurran cosas positivas. Pensar que no vale para nada al poco es tirar la toalla, y así no vamos a ninguna parte.

Visualizarlo
Debes de saber tu objetico, el cómo conseguirlo vendrá después. Debe de saber que es lo que realmente quieres conseguir.

Perseverancia
Conseguirlo dependerá de otros factores por lo que no todo se consigue al instante. Mientras más perseverancia pongas será más fácil conseguirlo porque durante más tiempo habrás encaminado tu actitud y tus actos a tener eso que quieres. Es como enamorar a alguien, a veces es instantáneo y otras debes ir ganando mini-puntos hasta llegar al nivel cien, pero está claro de que la otra persona debe ver tu interés para que reaccione.

Esfuerzo
Con pensarlo no basta, eso es solo una ayuda. Debes de levantarte y hacer lo necesario para conseguirlo.
Por ejemplo: en una entrevista de trabajo si vas confiado de que conseguirás tu puesto las posibilidades aumentan considerablemente a si crees que no. Pero debes de ir a la entrevista y hacer un mínimo para que toda esa confianza funcione.  

 Ángela Morales Ramírez